Después de unas arduas semanas de trabajo interminable, no exentas de dificultades sobrevenidas, y gracias al esfuerzo de los socios y socias de la asociación ArtiMent, llegó el gran día. Se instaló la parada en la Plaça de l’Ajuntament, y se fueron añadiendo los diferentes elementos para la venta hasta darle a la carpa su forma final, preciosa, llena de colores, texturas y diseños realizados todos de forma manual por los socios y socias de ArtiMent.
El día transcurrió de forma exitosa, algo revuelto por el tiempo, y se vendieron prácticamente todos los objetos de diseño, lo que significa la gran acogida que tuvieron los mismos entre el público.
El resultado nos ha llenado de orgullo, ánimo y fuerza, sentimientos renovados con los que acogeremos la próxima Diada.
Gracias a todos los miembros tanto de la Asociación como al público que hicieron posible una colorida, animada y maravillosa jornada.
